Hesperian Health Guides

Proyectos comunitarios

En este capítulo:

El construir un campo de juegos es una actividad que puede ayudar a los niños y a los miembros de la comunidad a aprender a trabajar juntos. Hay algunas cosas sencillas que hacen que los campos de juegos sean divertidos para todos los niños. Así, los niños que no ven bien no se sentirán excluidos. Todos los niños de la comunidad pueden disfrutar con las ideas que damos aquí.

4 hombres y mujeres hablan en un grupo.
¿Qué podemos hacer para que este proyecto se lleve a cabo?
Vamos a construir cosas que no cuesten mucho dinero. Podemos usar cosas que ya tenemos.
Podemos hablar con alguien en la escuela. Tal vez el campo de juegos pueda ser parte del patio de la escuela.
Y hay que construir las cosas de modo que los niños que usan muletas también puedan jugar allí.

Algunos consejos para construir un campo de juegos

Conviene construir un campo de juegos de una manera sencilla, usando materiales locales de bajo costo. El campo les dará a los niños y a sus padres la oportunidad de probar diferentes juegos. Después, la familia podrá construir en casa, de una forma gratuita o barata, lo que le sirva a su niño. Por eso, un campo de juegos hecho de ramas y varas, llantas viejas y otros materiales de poco valor es mucho mejor que un campo elegante con juegos caros hechos de metal.

Un campo de juegos para todos

Ribaralta es un pueblito aislado en Bolivia. Debido a que los caminos son muy malos, a veces uno se puede tardar hasta 30 horas en manejar de Ribaralta hasta la ciudad más cercana. El pueblo es muy pobre. No tiene un sistema de agua y mucha de la gente que vive allí no tiene electricidad. En el pueblo viven varios niños que tienen discapacidades y algunos de los padres de esos niños comenzaron a reunirse cada 2 semanas. Así descubrieron que se habían vuelto expertos en todo lo referente a las necesidades de sus niños.

Como habían aprendido tanto sobre las discapacidades, querían hablar con la comunidad acerca de los niños discapacitados. Decidieron construir un “campo de juegos para todos los niños” para reunir a los niños —con y sin discapacidades— por medio del juego.

La idea inicial de los padres, que según su cálculo tomaría 3 domingos de trabajo, se convirtió en un proyecto mucho más grande, a medida que la gente comenzó a pensar en otras ideas para el campo de juegos. Consiguieron que los comercios y las fincas regalaran ladrillos, clavos, madera y árboles. Cuando por fin lo terminaron, el campo de juegos tenía una cerca, bancas, árboles y juegos hechos con llantas usadas y madera local.

Ilustración de lo de abajo: varios niños juegan en un campo de juegos.
A los niños les gusta gatear por los barriles o tambores que han sido bien limpiados. A los niños ciegos les gustará oír los ecos de sus voces dentro de los barriles.
Traten de poner diferentes tipos de columpios. Construyan algunos columpios bajitos para que los niños pequeños puedan subirse por sí mismos.
Si los juegos están pintados de colores brillantes, los niños que no ven bien podrán encontrarlos y usarlos. Los niños ciegos podrán ir y venir por el campo sin perderse si los caminitos tienen orillas y si algunas de las áreas tienen pasto (césped) y otras no.
A los niños les encanta hacer ruido golpeando o tamborileando cosas. Este tipo de actividad les gustará especialmente a los niños ciegos.


Sugerencias para el campo de juegos
  • Anime a mucha gente de la comunidad a participar en la construcción y en el mantenimiento del campo de juegos. Será necesario limpiar y reparar el campo de juegos con regularidad, lo cual a su vez requerirá que alguien planee y organice el trabajo.
  • Es mejor que el campo de juegos sea sencillo y se construya con materiales locales, de bajo costo. Así, la gente podrá copiar las ideas y construir los mismos juegos para sus niños en sus propios hogares.
  • Para los postes que vayan a enterrarse, hay que usar un tipo de madera que no se pudra rápidamente. Trate la parte que va a quedar enterrada con aceite usado de motor, con alquitrán o con otras sustancias que sean resistentes a los insectos y a los hongos.
  • Los columpios pueden colgarse de cuerdas o cadenas. Las cuerdas son más baratas pero pueden pudrirse o desgastarse rápidamente. Las cuerdas de plástico o de nilón no se pudren en la lluvia pero el sol las debilita y las vuelve quebradizas.
  • Hay que revisar con frecuencia la fuerza de los postes y de las cuerdas. Para hacerlo, varias personas pesadas deben jalarlos al mismo tiempo. Las cuerdas deben reemplazarse en cuanto empiecen a debilitarse.
  • Asegúrese de que los niños participen en el diseño, la construcción y el mantenimiento del campo de juegos. Los niños pueden llevar a cabo una gran parte del trabajo si los adultos les explican qué hacer.