Mandíbula quijada dislocada

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En este capítulo:

 

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Si una persona abre la boca y luego no la puede cerrar, decimos que tiene la mandíbula dislocada. Se quedó atorada en la posición abierta. A menudo esto sucede cuando a la persona le faltan varios de los dientes traseros. Cuando ella abre mucho la boca, cuando bosteza o grita, la parte de su mandíbula que se une con el resto de la cabeza se separa mucho hacia adelante en la articulación, y no es capaz de regresar a su posición normal. También usted podría dislocar la mandíbula inferior por error mientras esté sacando un diente.

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SEÑAS:

• No es capaz de cerrar la boca con los dientes juntos.
• No puede cerrar los labios con facilidad.
• La mandíbula parece demasiado larga.
• Duele cuando se presiona en la articulación adelante del oído.
• No puede hablar con claridad

TRATAMIENTO:

El tratamiento busca mover la mandíbula hacia atrás adonde corresponde y mantenerla en esa posición hasta que los músculos se relajen.

1. Encuentre el modo de mantener quieta la cabeza de la persona. Por ejemplo, tenga a la persona sentada en el suelo con la cabeza recargada contra la pared.
2. Arrodíllese delante de ella. Ponga sus dedos debajo de la mandíbula por fuera de la boca. Ponga sus pulgares a un lado del último molar de cada lado. No ponga los pulgares sobre los molares, porque la persona puede morderle.

   Presione hacia abajo fuerte con las puntas de los pulgares. Fuerza la mandíbula a moverse rápidamente hacia abajo a su posición normal. Si la mandíbula no se mueve, tal vez los músculos estén demasiado tensos. Un doctor o un dentista podría dormir a la persona con anestesia, con lo cual sus músculos se aflojarán.




3. Amarre la mandíbula a la cabeza con un vendaje y manténgalo así por 3 ó 4 días (página 110). head–and–chin bandage
4. Para el dolor dé aspirina o paracetamol.
5. Explíquele el problema a la persona y el modo de cuidarse: (a) que coma alimentos blandos durante 2 semanas; (b) que se ponga trapos húmedos y calientes en la cara sobre la mandíbula; (c) que recuerde no abrir tanto la boca otra vez. Si es posible, reponga los dientes faltantes con un puente o una dentadura postiza.