Hesperian Health Guides
El cáncer infantil
No es fácil detectar el cáncer en los niños y los jóvenes. Normalmente las señas no son muy claras, como ir perdiendo peso poco a poco, dolor de cabeza con vómitos por la mañana, hinchazón o dolor que no mejora, fiebre que no se va, o sangrado o moretones inusuales. Todas estas señas también pueden indicar otros problemas, algunos serios y otros no graves. Si una niña o un niño tiene problemas de salud que no mejoran, llévelo a que lo revise una trabajadora de salud.
Linfoma de Burkitt
El linfoma de Burkitt es un cáncer infantil común en ciertas partes de África. Empieza como un bultito en el rostro, en la parte de arriba o abajo de la mandíbula. A diferencia de las paperas o de las glándulas inflamadas que son comunes en el VIH, en este caso solo se hincha un lado del rostro y sucede muy rápido. Puede crecer hasta el doble de tamaño en un solo día. No duele, aunque al principio puede ser incómodo. Generalmente los dientes que se encuentran cerca de la inflamación se aflojan o se mueven. Puede confundirse con un absceso dental.
El linfoma de Burkitt se trata con quimioterapia. Cuando la terapia se inicia a tiempo, casi siempre es exitosa.