Hesperian Health Guides

Cómo los niños aprenden a convivir

En este capítulo:

Una mujer carga a un bebé en sus rodillas y le sonrie.

No nacemos con la habilidad de convivir. Comenzamos a aprender a convivir en cuanto nos damos cuenta de las demás personas. Después, como niños y como adultos, seguimos desarrollando esa habilidad. Estamos aprendiendo a convivir toda la vida.

Al principio, desarrollamos habilidades muy sencillas. Un bebé aprende a sonreírle a su madre cuando ella le sonríe a él, o un niño aprende a esperar su turno para un juego. Pero a medida que un niño vaya creciendo, necesita desarrollar habilidades más complejas para poder llevarse bien con los demás.

A los 2 años de edad
  • pide ayuda cuando la necesita
  • juega junto a otros niños
  • imita a la persona que la cuida
A los 3 años de edad
  • le gusta ayudar con los quehaceres de la casa
  • le gusta que lo feliciten por hacer tareas sencillas
  • se da cuenta de los sentimientos de los demás
A los 5 años de edad
  • entiende reglas y sabe la diferencia entre lo bueno y lo malo
  • expresa muchos sentimientos
  • juega con otros niños
Un hombre se arrodilla cara a cara con una niña pequeña.
Un niño pequeño le limpia las lagrimas a su mamá.
5 niños tratan de alcanzar una pelota en el aire.


El comportamiento ‘correcto’ dependerá de la edad del niño. Si usted espera demasiado del niño, ambos quedarán decepcionados y tristes. Pero, si espera muy poco, él no desarrollará nuevas habilidades. Para información sobre las edades a que los niños desarrollan nuevas habilidades, vea los cuadros de desarrollo del niño.

Un niño teje una canasta.
Trate de tomar conciencia de su propia actitud hacia las habilidades de su hijo sordo. ¿Espera usted menos de lo que él realmente puede lograr?


Los niños aprenden a convivir paso a paso

El desarrollo de las habilidades para la convivencia, al igual que otros tipos de desarrollo, ocurre paso a paso. Para aprender a convivir, una niña necesita darse cuenta de los sentimientos de los demás. También necesita aprender a compartir las cosas con otras personas y a cooperar con ellas.

2 niñas juegan una al lado de otra.
Un niño con las manos cruzadas mira a 2 niñas comiendo dulce.
Aunque Kevin quiere una paleta, ha aprendido a no quitársela a otro niño.

Al principio, una niñita juega junto a otros niños. Eso quiere decir que le agrada estar cerca de ellos cuando juega, pero que no juega con ellos directamente.

Luego la niña aprende a jugar con otros niños. Aprende a compartir los juguetes y a jugar juegos en que todos tienen
que cooperar.

A medida que los niños vayan creciendo, necesitan entender reglas y poder controlar su comportamiento.

En casa

Un hombre le da de comer a su hijito en la boca y su hija le habla a través de la mesa.
Por favor, toma un poco de sopa, Yasir.
Yo también quiero sopa,
por favor.

Al principio, los niños aprenden a convivir al observar cómo se comportan sus padres y otros miembros de la familia. Los niños imitan lo que hacen y dicen las otras personas cuando se relacionan entre sí.

2 niños persiguen a un niño pequeño que juega con una llanta.
¿Luego me toca a mí?


Al jugar con otros niños

Mientras juegan, los niños aprenden a seguir instrucciones, a cooperar, a esperar su turno y a compartir las cosas. Los juegos les ayudan a los niños a entender sus propios sentimientos, a sentirse orgullosos de lo que pueden hacer y a formarse una idea de quiénes son.

Un hombre habla con un niño en lenguaje de señas mientras otro niño los mira.
Gracias por ayudarme a quitar los insectos de las matas de frijol.
Señor López, ¿cuáles insectos son los malos?

En la comunidad

Fuera de su propio hogar y de su familia más cercana, los niños ven cómo los adultos y los niños más grandes hablan, juegan y trabajan juntos. Ésa es la manera de que los niños aprenden a relacionarse con las personas que no son de su familia. Y en ese mundo más amplio, los niños aprenden cómo hacer las cosas de maneras distintas y ensayan diferentes formas de responder a distintas situaciones. Desarrollan sus habilidades para la convivencia a medida que descubran sus propios puntos fuertes y débiles.