Hesperian Health Guides

Cómo reducir los daños por el uso de plaguicidas

En este capítulo:

Si usted trabaja con plaguicidas, úselos con mucho cuidado. Sea agricultor o trabajador, puede proteger su propio bienestar, el bienestar de los demás y del medio ambiente. Las siguientes son algunas cosas que puede hacer:

  • Controle las plagas sin utilizar plaguicidas (vea Capítulo 15: La agricultura sostenible y Capítulo 17: Un hogar saludable).
  • No trabaje a solas con los plaguicidas.
  • Use el plaguicida sólo en el cultivo para el cual está indicado.
  • Use la cantidad mínima posible. Mayor cantidad no quiere decir mejor.
  • No mezcle diferentes plaguicidas.
  • Mantenga los plaguicidas fuera de su cuerpo y de otras personas.
  • Mantenga los plaguicidas alejados de las fuentes de agua.
  • No use plaguicidas cuando hace viento, llueve, o está por llover.
  • Asegúrese que su ropa lo cubra completamente.
  • Trate de no tocarse los ojos, la cara o el cuello cuando maneje plaguicidas.
  • Lávese las manos antes de comer, beber o tocarse la cara.
  • Mantenga bien cortadas las uñas de manos y pies para que los plaguicidas no se acumulen en ellas.
  • Use ropa y equipo protectores.
  • No ingrese a campos recién fumigados hasta que pase el peligro y no corra riesgo.
  • Lávese bien después de usar plaguicidas.
En un campo soleado, un hombre y una mujer usándoles ropa protectora hablan.
¡Hace mucho calor para usar mi equipo protector!
Sí, es incómodo, pero sin ropa protectora te puedes envenenar.

El equipo protector puede ser incómodo pero puede salvarle la vida

Para hacer que la ropa protectora sea menos incómoda, fumigue temprano en la mañana o al atardecer, cuando el sol no es tan fuerte. Descanse en la sombra y tome mucha agua limpia para no indisponerse por el calor. Para prevenir o tratar el golpe de calor, vea Donde no hay doctor u otro libro de medicina.

El rociador de espaldas de un hombre gotea mientras rocía un campo.

Si trabaja en los campos

Asegúrese que su equipo funcione bien

Para mayor seguridad revise el equipo antes de usarlo. Asegúrese de que los aplicadores de plaguicidas no estén dañados y que el equipo no gotee sobre usted. No use un rociador roto o rajado, o guantes rotos o rajados. Si usa un respirador, cambie los filtros cada día. Respirar cualquier plaguicida sin el respirador puede afectar su salud.

La mayoría de los agricultores y trabajadores no puede conseguir equipo protector que les sirva. Es una de las razones por las que usar los plaguicidas no es seguro.
Una mujer sosteniendo un respirador habla.
Los respiradores y guantes están hechos para hombres. No les quedan bien a los cuerpos de las mujeres o de las personas jóvenes. Las mujeres usan plaguicidas tanto o más que los hombres y el equipo protector debería protegerlas a ellas también. Si no les queda bien, no puede protegerlas.

Los propietarios de granjas deben facilitar sitios para lavarse

Si un trabajador agrícola usa plaguicidas, es responsabilidad de los propietarios de las granjas asegurarse de que haya lugares donde los trabajadores puedan bañarse y lavar su ropa y equipo, y también deben darles suficiente jabón y agua limpia.

Un hombre se lava las manos en un grifo de afuera.

Lávese bien y con frecuencia

Lávese las manos con agua y jabón antes de comer, fumar, beber, mascar chicle o tabaco, tocarse los ojos, la nariz, o la boca, y antes de ir al baño.

Después de trabajar y antes de lavarse, límpiese las uñas, tanto de las manos como de los pies. Luego báñese todo el cuerpo con jabón y agua.

Lave la ropa con cuidado después de trabajar con plaguicidas

El lavado de la ropa de trabajo es una de las cosas más importantes que se debe hacer para prevenir el envenenamiento con plaguicida. Cuando se vuelve a poner la ropa de trabajo sin lavarla, se expone la piel al plaguicida que quedó en la ropa.

Un hombre lava su ropa en un balde grande.
Lave siempre la ropa de trabajo separada de la ropa de uso diario y de la ropa de la familia.

Después del trabajo, cámbiese con ropa limpia y guarde su ropa en una bolsa de plástico o un recipiente especial para proteger a la persona que tiene que lavar esta ropa (incluso si es usted mismo).

Use jabón y agua limpia, y guantes para proteger sus manos. No lave la ropa cubierta de plaguicidas en los ríos. ¡Nunca se bañe ni lave nada en las acequias! Trate de no tocar la ropa sin guantes, y lávese las manos después. Arroje el agua sucia en el campo, lejos de las fuentes de agua potable.

Lave cada vez cantidades pequeñas de ropa. Vuelva a lavar si quedan manchas o el olor del plaguicida en la ropa. También lave las botas, guantes y sombreros con agua y jabón.

Cuelgue a secar la ropa lejos de las fumigaciones. No seque la ropa al aire libre cuando se esté fumigando en los campos cercanos o desde aviones que sobrevuelan.

Antes de lavar otra ropa en el lavadero, enjuáguelo con agua limpia y detergente.

Guarde siempre la ropa de trabajo separadamente, no la mezcle con otra ropa.

Una etiqueta con una calavera que dice "Peligroso, Plaguicidas, No Ingresar Hasta el 16 de Marzo de 2008."

No ingrese a un cultivo recién fumigado

Antes de ingresar a un sitio recién fumigado espere hasta que se haya secado y el polvo se haya asentado. Averigüe qué plaguicidas se usaron y no ingrese a un cultivo hasta que sea seguro. Lea las indicaciones de la etiqueta para saber cuánto tiempo tiene que esperar antes de ingresar al cultivo.

Cómo guardar los plaguicidas

Los plaguicidas deben guardarse en un sitio seguro y seco. Muchas veces los plaguicidas se dejan guardados por mucho tiempo y los envases se gastan y gotean. Si se encuentran gatos, pájaros y otros animales muertos alrededor del sitio donde se guardan plaguicidas, quiere decir que los productos químicos han comenzado a filtrarse en el suelo y el agua.

Mantenga los plaguicidas en sus propios envases

No guarde los plaguicidas en bolsas de forraje, botellas de bebida o bidones de agua. Asegúrese de que los envases estén firmemente cerrados, y guárdelos parados. Verifique que no tengan rajaduras, filtraciones o partes que se puedan quebrar.

Ponga etiquetas en los envases

Una calavera.

Ilustración de lo siguiente: Una mujer bebe de un recipiente etiquetado con una calavera y una tacha grande por encima.
¡NO!
Nunca use el envase de un plaguicida para llevar agua para beber o lavar.

Si compra pequeñas cantidades de plaguicidas y las pone en otros recipientes, ponga etiquetas al recipiente con el nombre del plaguicida y un dibujo que indique “peligro”, por ejemplo, una calavera y unos huesos en cruz. No use esos envases para nada más. Almacene los plaguicidas fuera del alcance de los niños, en un armario o envase con llave, lejos de la comida o el forraje.

Tenga cuidado al transportarlos

Cuando transporte o mueva plaguicidas, ponga el envase en la parte trasera de la camioneta o en la maletera del automóvil. Amarre el envase de modo que no se pueda mover o caer. No lleve los plaguicidas en la cabeza ni en las canastas donde lleva alimentos. No deje que los niños compren o carguen plaguicidas.

Deshágase de los envases vacíos de plaguicida

Nunca use los envases de plaguicida vacíos para beber, lavar, almacenar alimentos o cualquier otro uso. No use los envoltorios plásticos de los plaguicidas para hacer un impermeable o para cualquier otro uso personal. Lo mejor que se puede hacer con los envases de plaguicidas vacíos es hacerles unos huecos y enterrarlos. Así nadie volverá a usarlos.

Un hombre usando ropa protectora rellena un rociador de espaldas de un recipiente de pesticida.

Cuando mezcle y cargue plaguicidas

Use ropa protectora

Cuando mezcle plaguicidas y los cargue en un aplicador, use protector de ojos, guantes de goma y delantal, así como otra ropa protectora que use normalmente.

¡IMPORTANTE! Nunca mezcle plaguicidas con las manos..

Tome precauciones

Tijeras.
Sólo Para
PLAGUICIDAS'

Abra las bolsas de plaguicida con un cuchillo afilado o tijeras, de modo que no salpique el polvo. Lave el cuchillo o las tijeras después de cada uso, márquelas con una etiqueta y úselas sólo para los plaguicidas.

Si añade agua al plaguicida, nunca ponga la manguera directamente en la mezcla de plaguicidas. Mantenga la manguera limpia por si alguna persona la utiliza para tomar agua o para lavar.

Siga las indicaciones de medidas. Use las cantidades indicadas en la etiqueta. ¡Nunca mezcle, cargue o limpie el equipo cerca de los ríos, arroyos, acueductos o fuentes de agua!

No permita que los plaguicidas toquen su boca

Para destapar una boquilla (tobera) de aplicador atascada, sople a través de una pajilla o cañita, y marque el extremo que tocó la boquilla del aplicador para reconocerlo luego y no tocarlo con su propia boca en caso de usarlo de nuevo. Para sacar el plaguicida de un aplicador o transferir plaguicidas o combustibles de un recipiente a otro, no chupe nunca de una manguera con la boca. Tenga cuidado siempre de no respirar los venenos.

No toque o pruebe los plaguicidas o las semillas recubiertas de plaguicida. No coma nada de los cultivos sin lavarlos muy bien.

No fume, beba o coma mientras esté mezclando o aplicando plaguicidas. Deje la comida, goma de mascar y tabaco en recipientes cerrados, en lugares que no hayan sido tratados con el plaguicida. El tabaco y la comida absorben los plaguicidas, así que no los lleve mientras trabaja.

Si derrama el plaguicida

Antes de limpiar un plaguicida que se ha derramado, protéjase usted mismo, a las personas de alrededor y a las fuentes de agua. Si hay alguien que sepa más sobre cómo limpiar un derrame de plaguicida (una persona capacitada para hacer este tipo de trabajo), llámela y pida ayuda. Siempre use ropa protectora para hacer este trabajo.