Hesperian Health Guides

El género no es biología

En este capítulo:

Cuando nace un bebé, la gente pregunta “¿es niño o niña?” Los genitales del bebé le dan la respuesta. El sexo es femenino o la bebé es niña cuando tiene vulva, y es masculino o niño cuando el bebé tiene pene. Estas características sexuales son parte de nuestra biología. Pero el género es diferente. Nuestras culturas, tradiciones y leyes le asignan roles de género a los hombres y a las mujeres. Estos roles, por ejemplo, nos dicen que las mujeres son las que hacen el trabajo de la casa y los hombres son los que toman las decisiones importantes en la comunidad. Muchas veces la gente confunde los roles de género con los roles de sexo y los tratan como algo “natural” o que no puede ser cambiado, piensan que “así son las cosas”.

Para entender la relación entre el género y la salud debemos entender cuáles aspectos de ser hombre y de ser mujer son biológicos y cuáles son decisiones sociales de la gente. Conocer la diferencia nos puede ayudar a decidir qué podemos cambiar y dónde debemos enfocar nuestros esfuerzos para resolver la desigualdad entre los hombres y las mujeres en nuestras comunidades.

Actividad ¿ De dónde vienen los roles de hombre y mujer?

  1. Coloque el rostro de un hombre en un papel y el rostro de una mujer en otro papel. Invite a las y los participantes a decir lo que piensan cuando escuchan las palabras “hombre” y “mujer”, y escriba sus ideas en la hoja correspondiente. Pídales que piensen en características físicas, de personalidad, rasgos, capacidades, papeles en la familia y en la comunidad, y en cómo se supone que las mujeres y los hombres se deben sentir y comportar. Después lea en voz alta las 2 listas.
    ilustración de lo anterior: listas de papeles de sexo y género para hombres y mujeres.
    fuerte     duro
    sustento familiar
    pene    no llora
    no pide ayuda      violento
    músculos grandes
    policía    padre    testículos
    tiene sexo con quien quiera
    está en control     doctor
    atleta     juez
    líder     barba
    valiente
    hace deportes
    callada      bonita
    sangra cada mes
    embarazada   madre  cocina
    maestra   emocional   limpia
    senos    sigue al hombre
    complace a los demás
    sirvienta       da a luz
    sensual      enfermera
    cuidadora      sensata
    maquillaje     pasiva
    obedece a su padre
  2. Intercambie los rostros entre los 2 papelógrafos de manera que el de la mujer quede ahora sobre la lista del hombre y el del hombre quede sobre la lista de la mujer. Pregúntele al grupo qué palabras en el papelógrafo del “hombre” no pueden describir a la mujer en lo absoluto, tales como “padre” o “testículos”. Tache esas palabras. Explique que todas las palabras tachadas tienen que ver con el sexo del hombre. Las palabras que quedan describen los roles de género que la sociedad espera que los hombres sigan.
  3. Haga lo mismo con las palabras en la lista de la “mujer”. Tache las palabras que absolutamente no pueden describir a un hombre, como “sangra cada mes” y “da a luz”. Las palabras tachadas se relacionan con el cuerpo de las mujeres, es decir, su sexo. Las palabras que quedan describen los roles de género.
  4. Hablen en grupo sobre las diferencias entre los roles de sexo (el aspecto físico de las mujeres y hombres) y los roles de género (cómo se espera que las mujeres y los hombres se vean, sientan, piensen y se comporten). Puede hacer las siguientes preguntas:
    • ¿Cómo describirían la diferencia entre el sexo y el género?
    • ¿Están de acuerdo con todas las palabras que describen a las mujeres y con las palabras que describen a los hombres? ¿Con cuáles no están de acuerdo? ¿Por qué?
    • ¿Qué roles de género comparten con más frecuencia los hombres y las mujeres?
    • ¿Cómo aprenden los niños y las niñas sus roles de género?
  5. Pregúntele al grupo qué otras cosas pueden afectar los roles de género, tales como la edad, la educación, el color de la piel, o si la persona tiene propiedades o pertenece a algún grupo étnico.
    ¿En qué se diferencian las expectativas de género de hombres y mujeres que tienen una posición social más alta o más baja? ¿Quiénes tienen más poder para tomar decisiones por sí mismos y por otros? ¿Quiénes tienen más libertad para decir lo que piensan y para hacer lo que consideran ser mejor?
  6. Finalmente, hablen sobre cómo las expectativas de género afectan la salud de las mujeres y de los hombres ¿Qué roles y expectativas ayudan a que las mujeres y los hombres se mantengan sanos? ¿Qué expectativas pueden causar más problemas de salud para las mujeres o los hombres?


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A veces es mejor trabajar por separado con hombres y mujeres para que sientan la libertad de hablar abiertamente.

Ver la masculinidad y la feminidad

Los roles de género crean expectativas sobre el hombre ideal (la masculinidad) y la mujer ideal (la feminidad). Los hombres y las mujeres pueden tener una vida de plenitud, sentido de pertenencia y de realización, cuando las expectativas de género en una comunidad incluyen el respeto mutuo y una valoración de las diferencias que existen en los roles y las identidades de las personas. Pero a menudo los roles femeninos tienen una posición social mucho más baja que los roles masculinos. La posición social desigual entre los géneros es dañina en especial cuando ser hombre significa tener control sobre las mujeres o sobre cualquier persona que parezca o se sienta más femenina.

Reflexionar sobre las cualidades femeninas y masculinas que la comunidad aprueba y el por qué las aprueba, sirve para ver las diferencias entre la posición social de las mujeres y la de los hombres. También ayuda al grupo a entender cómo la mayoría de las mujeres y los hombres normalmente actúan para reforzar las expectativas de género, y qué es lo que pasa cuando una persona actúa de manera diferente.

Actividad Sobre el género: ¡No sea cuadrado!

  1. Divida al grupo en grupos pequeños de mujeres y de hombres por separado. Dele a cada grupo una hoja de papel grande.
  2. Pida que cada grupo dibuje a una mujer o a un hombre en el centro del papel, ya sea de su propio sexo o del sexo opuesto. Pida que el grupo dibuje la ropa que considera ideal para el sexo que elegió presentar en su papel. Pídales que dibujen un recuadro alrededor del dibujo de modo que la figura quede al centro y completamente dentro del recuadro y que quede espacio en el resto del papel.
  3. Después pídale a los grupos que escriban o dibujen todas las cualidades de la mujer o del hombre ideal dentro del recuadro que rodea a la figura. Pídales que piensen en cómo se espera que las mujeres y los hombres se comporten en la comunidad, en el trabajo, dentro de la familia y en sus relaciones sexuales. ¿En qué se supone que son buenos los hombres? ¿En qué se supone que son buenas las mujeres? ¿Qué sentimientos está bien que demuestren los hombres? ¿Y las mujeres?
  4. Después invite al grupo a pensar en las características que se consideran negativas o no deseables para las mujeres y para los hombres. Escriba o dibuje esas características afuera del recuadro que encasilla la figura de la mujer o del hombre. Puede preguntar: ¿Qué sentimientos deben esconder los hombres? ¿Y las mujeres?
    ilustración de lo anterior: cajas de género para hombres y mujeres.
    pequeño
    llora cuando está triste
    débil
    tiene miedo
    le gusta cocinar
    guapo
    respetado
    no tiene empleo
    no es competitivo
    emocional
    bajo de estatura
    fuerte
    confianza en sí mismo
    buen salario
    buen proveedor
    sin dinero
    bullosa
    sabe demasiado
    egoísta
    demasiado gorda
    capaz
    bonita
    servicial
    agresiva
    atrevida
    exigente
    lee mucho
    fea
    agradable
    firme
    le gusta estudiar
    amable
    callada
    le gustan los deportes
    fuerte
  5. Vuelva a reunir a las y los participantes y pídales que presenten sus dibujos.
  6. Hablen en grupo sobre los dibujos y las expectativas que muestran. Por ejemplo, ¿Cómo se benefician los hombres o las mujeres de las características que aparecen dentro del recuadro? ¿Qué cualidades o comportamientos se consideran menos importantes o deseables? ¿Por qué?
  7. Pregúnteles si piensan que sería difícil que la mayoría de las mujeres o de los hombres alcancen estos ideales. ¿Por qué? ¿Qué pasa cuando la gente no cabe dentro del recuadro “ideal” o cuando trata de vivir fuera de los recuadros “ideales”? ¿Hay ventajas y desventajas de ser diferente? ¿Cuáles son? (Podría señalar que la gente real tiene un poco de ambos recuadros.) Estos recuadros, ¿cómo afectan la salud de las mujeres y de los hombres?
  8. Después pregunte: ¿De dónde vienen estas ideas? ¿Cuándo se aprenden las “reglas” sobre cómo ser niña, niño, mujer u hombre? ¿Quién enseña estas reglas? ¿Cuántas vienen de los padres y las madres? ¿Cuántas vienen de otras autoridades como maestros o religiosos? ¿Qué papel juegan los medios de comunicación, como la televisión, la publicidad, las películas, las canciones y los videos?

Para continuar la reflexión sobre los roles de género con un grupo solo de mujeres, haga la actividad, Soñar con un mundo sin límites

Imaginemos un mundo en el que no existen los límites del género

Las mujeres a menudo hablan entre sí sobre sus experiencias y emociones. Hablar sobre las dificultades de sus vidas, en especial sobre las relaciones difíciles con los hombres, les ayuda a sentirse menos solas. Pero es raro que en estas pláticas cuestionen las causas de sus problemas o cómo podrían cambiar su situación. Las actividades de reflexión y de compartir experiencias, pueden crear un espacio cómodo y seguro para que las mujeres hablen sobre su vida y comparen sus roles con los de los hombres.

Esta actividad puede hacerse después de Sobre el género: ¡No sea cuadrado! para que el grupo reflexione sobre las formas en que los roles y las expectativas de género pueden cambiar para permitir que las mujeres tengan un mayor control sobre su salud.

Actividad Soñar con un mundo sin límites

Haga esta actividad con un grupo de mujeres y niñas, sin hombres o niños. (Esta actividad puede ser adaptada para hacerla con solo hombres y niños). Muéstrele al grupo los dibujos que se hicieron en Sobre el género: ¡No sea cuadrado!. Explique que esta actividad nos ayuda a pensar en un mundo nuevo, donde el género no nos encajona.

  1. Reflexión guiada. Invite a las participantes a formar un círculo, para que el ambiente sea íntimo y no se sienta como una capacitación. También puede bajar la intensidad de la luz, o poner música suave. Pídales que cierren los ojos, que respiren profundamente y se imaginen a sí mismas cuando eran niñas. Explique que primero les va a pedir que hagan memoria y después que imaginen ciertas cosas. Cada una pensará por sí sola y no compartirá sus ideas en voz alta porque este ejercicio se hace en silencio. Hable tranquila y lentamente y haga preguntas como:
    • ¿Cuándo se dio cuenta de que era diferente ser niña que ser niño? ¿Cómo se dio cuenta y cómo se sintió?
    • ¿Hubiera sido distinta su experiencia como niña, si los niños y las niñas fueran tratados de manera más similar, si hubieran tenido las mismas libertades y las mismas responsabilidades?
    • ¿Cómo sería para los hombres tener más libertad? ¿En qué cambiaría la vida de los hombres si sus roles y responsabilidades se compartieran por igual con las mujeres?
    • ¿Cómo sería para las mujeres tener más libertad? ¿En qué cambiaría la vida de las mujeres si sus roles y responsabilidades se compartieran por igual con los hombres?
    Espere 1 ó 2 minutos después de cada pregunta para que las participantes tengan suficiente tiempo para pensar.
  2. Compartir en grupos pequeños. Pídales a las mujeres que abran los ojos y que formen grupos pequeños para compartir sus ideas sobre la reflexión guiada. Cada mujer debe tener suficiente tiempo para hablar mientras las demás escuchan en silencio.
  3. Imaginar un mundo sin las limitaciones de género. Después de que todas hayan participado, pídales que permanezcan en los grupos pequeños y que hablen entre sí sobre las siguientes preguntas:
    • Si a las niñas y a los niños se les tratara de manera más equitativa, ¿cómo cambiaría la forma de actuar de las niñas? ¿Cómo se sentirían?
    • Si las mujeres tuvieran la misma libertad, poder y responsabilidad que los hombres, ¿cómo se comportarían? ¿Cómo se sentirían? ¿Cómo se sentirían y comportarían los niños y los hombres?
    • ¿De qué formas cambiarían las vidas de ustedes? ¿De qué formas cambiarían las vidas de otras mujeres que ustedes conocen? ¿Las de sus hijas? ¿Las de sus mamás?
  4. Dibujar sin recuadros. Los grupos pueden hacer dibujos nuevos que muestran cómo sería la vida sin estar encajonadas por el género. Dele a cada grupo una hoja y pídales que dibujen a una mujer en un mundo donde las mujeres tienen las mismas libertades y oportunidades que los hombres. Usted puede pedirles que también dibujen a un hombre.
    ilustración de lo anterior: la mujer ideal y el hombre ideal.
    Mujer
    inteligente
    no se da por vencida
    amable
    estudiosa
    instruida
    madre
    tiene confianza en sí misma
    capaz
    resuelve problemas
    audaz
    decidida
    fuerte
    cocina bien
    tiene buen trabajo
    Hombre
    fuerte
    afectuoso
    cuida a los niños cuando se enferman
    capaz
    paciente
    comparte las labores domésticas
    tiene un oficio
    leal
    comprensivo
    no se emborracha
    comparte el dinero
    trabaja mucho
    valiente
    cooperativo
  5. Para terminar, pídale a los grupos que compartan sus dibujos y sus ideas. Puede invitar a que todas compartan cómo piensan que sería diferente la salud de las mujeres y las niñas, así como la salud de los hombres y los niños. Deje suficiente tiempo al final para que las participantes hablen sobre cómo se sintieron durante la actividad y lo que piensan de las reflexiones y los dibujos.

El género y el trabajo

En todo el mundo, algunos tipos de trabajo se consideran “trabajo de hombres” y otros se consideran “trabajo de mujeres”. Estas diferencias en las expectativas relacionadas con el trabajo, forman parte de los roles de género.

El trabajo que muchas mujeres hacen –preocuparse por los niños y las necesidades diarias de la familia– muchas veces no se valora y ni siquiera se considera trabajo. El no valorar el trabajo de las mujeres es una de las causas de que las mujeres tengan una posición social baja y que sus cargas de trabajo sean injustas. Hablar sobre los roles de género y el trabajo sirve para pensar en los cambios que se pueden hacer en la vida de las mujeres para mejorar su salud.

mujeres trabajando en casa y en una fábrica; una de ellas menea una olla y habla con sus hijos mientras un hombre duerme.
No molestes a tu papá. Él trabaja mucho y necesita descansar.

Actividad Un día en la vida

Enumerar las actividades que hacen los hombres y las mujeres en un día normal sirve para hablar en grupo sobre el trabajo y el género. A veces los hombres y las mujeres no saben bien lo que hace la otra persona durante el día. Esta actividad se puede adaptar para grupos solo de mujeres para crear consciencia sobre las responsabilidades domésticas y la necesidad de valorarlas como trabajo.

  1. Divida a las y los participantes en grupos pequeños de hombres y de mujeres por separado. A los hombres, pídales que hagan una lista de las actividades que hace un hombre durante un día normal, desde que se levanta hasta que se duerme. A las mujeres pídales que hagan lo mismo sobre lo que hace una mujer. También podría pedir que piensen sobre cuánto tiempo toma cada actividad, dónde sucede y quién les ayuda en cada actividad.
  2. Después de hacer la primera lista, pídales a los grupos de hombres que hagan otra lista con todas las actividades que piensan que las mujeres hacen en el mismo espacio de tiempo, y pídales a las mujeres que hagan la misma lista sobre los hombres.
  3. Cuando hayan terminado de hacer sus 2 listas, compártanlas con todo el grupo.
  4. Hablen en grupo sobre las listas. Pregunte si se sorprendieron sobre algo que aparece en las listas de trabajos o sobre cómo hicieron las listas. ¿Creen que las mujeres hicieron un buen trabajo con las listas de las actividades de los hombres? ¿Hicieron un buen trabajo los hombres con las listas de las actividades de las mujeres?
  5. Hablen en grupo sobre lo que hay en las listas. ¿Qué diferencia hay entre el tipo de actividades que hacen las mujeres y los hombres? ¿Por qué los hombres y las mujeres hacen distintos tipos de actividades? ¿Qué actividades en la lista de los hombres también las podrían hacer las mujeres? ¿Qué actividades en la lista de las mujeres también las podrían hacer los hombres? ¿Por qué podrían o no podrían hacer estas cosas?
  6. Hablen sobre otras diferencias entre las mujeres y los hombres que tienen que ver con el trabajo de cada género. Por ejemplo, pregunte qué grupo tiene más tiempo libre para usar a su gusto. ¿Qué grupo tiene más carga de trabajo? ¿Piensan que estas diferencias están justificadas? ¿Por qué sí o por qué no? También puede preguntar si hay mujeres u hombres que realizan ciertos trabajos que aparecen en la lista del otro género. ¿Por qué realizan un trabajo que normalmente se espera del otro género? ¿Son respetados más o menos por hacer ese trabajo?
  7. Para terminar la actividad, pregúntele al grupo si cambiaría las expectativas que se tiene sobre las actividades diarias y las cargas de trabajo de los hombres y de las mujeres. Invítelos a explicar cómo se beneficiarían las mujeres y los hombres con estos cambios. ¿Qué retos enfrentarían? Hablen sobre lo que haría cada persona para promover estos cambios, lo que pueden hacer otras personas y cómo el grupo puede ayudar a que toda la comunidad cambie.
    hombres y mujeres hablando en un grupo.
    Nunca había pensado que lo que hacen las mujeres sí es trabajo.
    A pesar de que trabajo todo el día en el pueblo, todavía tengo que trabajar en casa y nunca descanso.
    Siempre pensé que los hombres necesitaban más comida y descanso porque trabajan más duro. Ahora sé que las mujeres trabajan muy duro pero comen y descansan menos.
    Parece que las mujeres trabajan más horas y descansan menos. ¡No me parece justo!

La organización Hilo Rojo une a las mujeres para promover su salud y los derechos en Guyana
una mujer trabajando afuera de su casa mientras otra mujer le hace preguntas.

La gente de Guyana en Sudamérica pertenece a diversos grupos étnicos que tienen costumbres y tradiciones diferentes. Las personas provienen de africanos que fueron llevados como esclavos, de inmigrantes de la India y de personas indígenas de Guyana. Durante muchos años estos grupos han estado en conflicto y las mujeres no sentían que tenían mucho en común. Una organización llamada Hilo Rojo quería encontrar una manera de unir a las mujeres para mejorar la condición social de todas las mujeres guyanesas. Llevaron a cabo una encuesta para saber lo que las mujeres hacían con su tiempo. Visitaron a mujeres en todo el país y usaron la encuesta para preguntarles qué hacían durante el día. Descubrieron que la mayoría de las mujeres, sin importar su grupo étnico, ocupaba su tiempo de la misma forma: se levantaba temprano, iba por agua o combustible, cocinaba, le daba de comer a su familia, limpiaba, cuidaba de sus pequeños jardines, tenía un empleo, lavaba ropa, cuidaba a los niños y hacía otras cosas. Casi todas trabajaban entre 15 a 16 horas al día. Hilo Rojo les mostró a las mujeres los resultados de la encuesta y les preguntó “¿Por qué estamos divididas? Todas estamos haciendo el mismo trabajo”. Este proyecto logró unir a mucha gente. Hilo Rojo creció para convertirse en un grupo multiétnico que trabaja de muchas maneras para promover los derechos humanos de las mujeres, como ganar dinero y eliminar la violencia de género.

Los roles de género cambian a través del tiempo

Los roles de género a menudo les asignan a las mujeres una posición social más baja, lo que resulta en que tengan menos acceso a la atención de salud, menos control sobre su cuerpo, más horas de trabajo y menos poder en la toma de decisiones. Para que las comunidades mejoren la salud de las mujeres, necesitan cambiar los roles de género, especialmente aquellos que hacen que las mujeres sean vulnerables ante los hombres. Esto puede parecer muy difícil de hacer, pero es menos difícil cuando vemos que el género no es biológico. Lo que pensamos como masculino o femenino viene de nuestras ideas sobre los hombres y las mujeres, no de la naturaleza. También ayuda recordar que los roles de género han cambiado a través del tiempo en todo el mundo. Hablar sobre la vida de las mujeres en el pasado comparada con el presente puede ayudar a que la gente dé cuenta de que los roles de género sí cambian, y que esos cambios pueden mejorar la salud de las mujeres.

Actividad Cómo era antes

En esta actividad las mujeres mayores se sientan en un círculo interior y hablan sobre la vida de sus mamás. Las mujeres más jóvenes se sientan en un círculo exterior y escuchan y hacen preguntas. Después de responder a las preguntas, los grupos cambian de lugar para que las mujeres jóvenes compartan algunas de sus reflexiones sobre lo que piensan que ha cambiado, mientras que las mujeres mayores escuchan.

  1. A las mujeres mayores pídales que hablen de lo que aprendieron de sus mamás sobre la feminidad y sobre ser mujer. También, sobre cómo sus vidas son diferentes a las de sus mamás. ¿Qué es lo que cambió para que sus vidas como mujeres fueran diferentes? ¿Por qué sucedieron estos cambios? Pregúnteles si hubo formas en las que ellas, sus amigas o sus mamás se rebelaron contra lo que se esperaba de las mujeres en su comunidad. ¿De qué manera algunas mujeres han ido en contra de los roles tradicionales de género? ¿Qué pasó cuando lo hicieron? Puede pedir que compartan con las jóvenes los cambios que han habido en las costumbres y normas sobre las amistades y los romances entre personas. ¿Cómo han cambiado las normas sociales sobre las relaciones sexuales y afectivas? ¿Qué hacían las mujeres en el pasado para cuidar su salud?
  2. Cuando sea el turno de las jóvenes a sentarse al centro, pídales que comiencen por hablar sobre lo que les gusta de ser mujeres y lo que se les hace injusto de ser mujer. ¿En qué creen que se diferencian sus ideas sobre ser mujer de las ideas de sus abuelas y de otras personas en la comunidad? Pídales que hablen sobre sus metas a futuro. ¿A qué mujeres admiran? ¿Por qué? ¿De qué manera podemos construir relaciones sanas en nuestras vidas? ¿Cómo imaginan su vida en el futuro?
  3. Para terminar, pregúntele al grupo entero lo que esta actividad muestra sobre el género, cómo cambia a través del tiempo y cómo podemos ayudar a que cambie durante el curso de nuestras vidas.


una mujer hablando.
El grupo de jóvenes con el que trabajo no quería reunirse con las mujeres mayores. Así que cada joven entrevistó a su abuelita o a otra mujer mayor y después compartieron lo que aprendieron. Algunas escribieron poemas, otras escribieron sus entrevistas como un artículo de revista y unas cuantas hicieron sociodramas y representaron el papel de sus abuelas.


Esta página se actualizó el 01 feb 2021